ARGENTINA. Peter Brook: Los acontecimientos decidieron por nosotros
Tres grandes textos que responden a las preguntas de hoy: El gran inquisidor, La muerte de Krishna y Tierno Bokar
Por Marita Foix
Este año en el portal de su teatro, Les Bouffes du Nord, Peter Brook colocó estas palabras para encabezar la cartelera 2004/2005 que sirven de título a esta ponencia:
"Si bien las dos grandes obras maestras, "Los Hermanos Karamazov" y "El Mahabharata" pertenecen a todos los tiempos, son de una actualidad penetrante. Desde hace años que nosotros decidimos presentarlas juntas, "El Gran Inquisidor" y una parte del "Mahabharata" que nos tocaba particularmente, "La muerte de Krishna". Pero el momento no nos parecía nunca propicio. Súbitamente los acontecimientos decidieron por nosotros. Esta temporada "La muerte de Krishna" vuelve a Les Bouffes y se reune con "El Gran Inquisidor" y "Tierno Bokar". Estos tres grandes textos que vienen de lejos tocan con profundidad las preocupaciones, las inquietudes y las preguntas de hoy". (1)
Peter Brook acaba de cumplir 80 años y en su largo itinerario de director teatral estas tres puestas en escena son la culminación de su itinerario en el teatro sagrado que así lo define él mismo en "El espacio vacío":
"Lo llamo Teatro Sagrado para abreviar, pero podría llamarse Teatro de lo Invisible-Hecho-Visible: la noción de que el escenario es un lugar donde puede aparecer lo invisible se ha apoderado de nuestros pensamientos". (2)
Esta definición es clave para entender el teatro de Peter Brook y se relaciona con dos elementos que afirma que hemos perdido: el rito y el ceremonial como valores originarios. La celebración, punto culminante de una experiencia teatral que puede mostrar diferentes formas de manifestar la aprobación: aplausos o silencio. La revalorización del silencio la considera primordial.
Desde otro lugar, Yoshi Oida, actor japonés del teatro Noh y desde los comienzos en la compañía de Brook, consigna su impresión sobre el teatro sagrado:
"Cuando dos actores están realmente actuando juntos (y no simplemente diciendo el texto el uno al otro), el público puede sentir que "algo" sucede entre ellos... (3)
Aquí aparece la diferencia con el teatro naturalista. Brook define el naturalismo diciendo que "en las obras naturalistas el dramaturgo crea el diálogo de tal manera que, aún pareciendo natural, muestra lo que quiere que se vea." (4) Ni siquiera el teatro del absurdo logra su objetivo, se agota y llega a un callejón sin salida. Artaud en cambio quería que el teatro fuera un lugar sagrado, un teatro que conmoviera, no un teatro ameno. El público entonces se sentiría conmovido y sacudido. "Artaud sostenía que sólo en el teatro podríamos liberarnos de las reconocibles formas en que vivimos nuestras vidas cotidianas. Eso hacía del teatro un lugar sagrado donde se podía encontrar una mayor realidad." (5)
Brook avanza en la espiritualidad que su mirada ha descubierto en su conocimiento de la sabiduría oriental y en algunas comprobaciones realizadas en América (Brasil). Aquí nuevamente tiende una línea muy artaudiana. Estas conclusiones podrían comprobarse en otras comunidades indígenas de Argentina y el resto de Latinoamérica. Es la capacidad de ponerse en riesgo y en esto se basa el teatro, dice Brook. Dentro de una cultura que él llama "tercera cultura":
"no aquella que tiene un nombre o una definición, sino la que es salvaje, la descontrolada; aquella que, de alguna manera, puede ser relacionada con el Tercer Mundo; algo que para el resto del mundo es caótico, anárquico, algo que exige constantes ajustes, que nunca podrá ser permanente." (6)
La vuelta a lo primitivo, a lo desbordado, a lo desordenado, lo que él llama "la cultura de los eslabones", la que hace visible lo invisible. Y así nace el teatro.
Brook mismo cuenta cómo fue su acercamiento al teatro oriental, cómo fue pasando de la admiración ("admirar sin entender") hasta penetrar en el mundo artístico oriental. Sobre la extrañeza que se siente ante una historia contada por alguien a través de la danza, de la vestimenta del bailarín, de la aparición de códigos que procedían de otra cultura. Cultura ajena a la cultura occidental. Su deslumbramiento es similar al que sintió Artaud ante el teatro balinés.
Junto a Jean Claude Carrière comienzan a conocer "El Mahabharata" según un estudio del sánscrito realizado por Philipe Lavastine. Allí es cuando toman conciencia de que están ante una de las grandes obras de la historia de la humanidad. El compromiso entre Brook y Carrière queda sellado: llevar este material al mundo occidental. Los viajes a la India son continuos y la comprobación de la inagotable creatividad.
Una observación que Brook aplicará en las diferentes puestas del "Mahabharata": "la separación entre representación y ceremonia es difícil de determinar..." (7) Y para un gran poema épico se necesita un narrador. Su propósito es, desde el primer momento, no imitar las representaciones hindúes sino un trabajo basado en sugerir.
¿Cuál sería la ruptura de lo que Brook y Carrière entendían por teatro? La presencia de un narrador, Vyasa, que relata la historia de sus antepasados a un joven. En realidad similar al comienzo del film "Encuentros con hombres notables" (1979) y la puesta teatral "La muerte de Krishna" (2003, Buenos Aires).
En el "Mahabharata", cuando Arjuna le pregunta a Krishna quién es él, Krishna responde:
"Soy todo lo que piensas, todo lo que dices. Todo está en mí, como perlas en un collar. Soy el olor de la tierra y el calor del fuego. Soy la aparición y la desaparición. Soy las trampas del cazador. Soy el brillo de todo lo que brilla. Soy el tiempo que envejece. Todos los seres caen dentro de la noche y son traídos a la luz del día. Ya derroté a todos estos guerreros. Pero quien cree que puede matar y quien cree que puede ser muerto, se equivoca. Ningún arma puede quitarle la vida. Ningún fuego puede quemarla. Ningún agua puede inundarla. Ningún viento puede secarla. No temas, levántate...porque yo te amo. Ahora puedes dominar tu espíritu misterioso e incomprensible. Puedes ver tu otro lado. Actúa como tienes que actuar. Yo mismo actúo siempre. Levántate". (guión)
En cada escena Brook juega el espacio y la iluminación meticulosamente al compás de la historia narrada. Su propósito es mostrar al mundo occidental los finales del siglo XX, desde Hiroshima hasta Bush en Irak, quizá anticipar una guerra nuclear. Estas ideas fueron repetidas por Maurice Bénichou (8) en la entrevista realizada con motivo del Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires y el estreno de "La muerte de Krishna", el final del "Mahabharata".
Al referirse a "La muerte de Krishna" siempre lo hace en relación a ese trabajo mayor emprendido por Peter Brook: el "Mahabharata". Afirma que hace dieciocho años no estaba este final, es nuevo. La idea es retomar este trabajo antes de irnos (de este mundo, aclara). Nace con el deseo de conjurar guerras, apocalipsis, al dinero como rey. No sólo piensa en Bush, Putin y Pinochet, sino en las Madres de Plaza de Mayo ("ningún hijo va a estar acá", dice el texto). Considera que no podemos estar indiferentes ante la indiferencia.
A partir del "Mahabharata", Brook profundiza un camino de exploración en el teatro sagrado que se agrega a sus innumerables experiencias en distintos lugares de Asia y África que lo llevan a diseñar un teatro intercultural. Aquellas nociones de teatro sagrado y teatro tosco parecen confluir en sus últimas puestas en escena. Prueba de ello son sus obras africanas, entre las que sobresalen "El traje" (1999) y "Tierno Bokar" (2004). Una manera de abordar el siglo XXI, una forma de hablar de estos tiempos difíciles.
Para la puesta en escena de "Tierno Bokar" se tomó la obra de Amadou Hampaté Bâ a quien Brook conoció en los años 70. La dramaturgia del texto pertenece a Marie-Hélène Estienne, que trabaja permanentemente en la adaptación de textos con Brook. Se basan en las siguientes obras de Amadou Hampaté Bâ, escritor maliense (1901-1991):
Vida y enseñanza de Tierno Bokar, el sabio de Bandiagara.-París : Seuil, 1980.
Amkouell el niño peul.-Memorias I (Actas del Sur, 1992). Editado en 1991.
¡Sí, mi comandante!.-Memorias II (Actas del Sur, 1996). Editado en 1999.
Sobre las huellas de Amkouell el niño peul.-(Actas del Sur.1996 y 1998).
El libro, "Vida y enseñanza de Tierno Bokar, el sabio de Bandiagara", trata sobre una larga enseñanza pública de Tierno Bokar (1875-1940), un maestro del sufismo en África Negra. Por su familia recibe una gran diversidad de tradiciones africanas además del sufismo.
La colonización francesa lo obliga a cerrar su lugar sagrado de aprendizaje y prohibieron todo contacto con él. Tierno Bokar vivió hasta su muerte en el aislamiento con su postura pacifista, lamentando la declinación de las cuestiones del espíritu y el poder creciente del dinero.
Sus enseñanzas se apoyan en el Corán y en los maestros de sufismo. Pero también está transmitiendo un modelo de vida que se fundamenta en la simplicidad y la modestia. Hay cierta semejanza entre sus enseñanzas y las de San Francisco de Asís, búsqueda de Dios en unión con la naturaleza.
Este modelo de enseñanza se inscribe en la tradición oral africana, en la propia cultura donde cada uno va construyendo su identidad en contacto con los otros y en un auténtico intercambio. La palabra es creadora de una relación con Dios, es palabra vital y amorosa. La palabra es mensajera de una posición de tolerancia entre los hombres. La vida de Tierno es un ejemplo claro de toda su metodología de aprendizaje.
Peter Brook insiste en la tolerancia política como una forma de desarrollar el espíritu crítico, la serenidad de espíritu cuando señala los temas que el teatro tiene que tratar hoy:
"La obligación del teatro es ir a contra corriente de la sociedad. En los años sesenta, el teatro tenía que incidir en los tabúes sexuales, por ejemplo, como uno de los temas que chocaban a la burguesía. El choque de ayer, sin embargo, se transforma en la banalidad de hoy. Por eso ahora al teatro le toca crear, aunque sea durante una o dos horas, una pequeña atmósfera de tranquilidad y paz, que es lo que nos falta en la sociedad en que vivimos. El teatro no puede cambiar el mundo, pero si que puede darnos un respiro". (9) El respeto por el otro es la única forma de terminar con el racismo.
Marie-Hélène Estienne señaló a El País, las dificultades que tuvieron para la adaptación del texto:
"Por un lado estaban las historias y enseñanzas de Tierno Bokar y, por otro, había que explicar las disputas que surgieron por la discrepancia entre el significado del número 11 y el 12 que aparecen en la corriente sufista del islam". (10)
La discusión es entre Tierno y Hamallah: el 12 es la ortodoxia aceptada hasta ese momento por Tierno, el 11 representa lo insurreccional que practica Hamallah. La obra nos cuenta la conversión de Tierno Bokar al 11. Bruce Myers es el gobernador francés que actúa como un inquisidor, implacable y que insiste para que Hamallah vuelva al 12, la ortodoxia.
La crítica aclara que este malentendido es lo que hace complejo el espectáculo. Y se agrega:
Ésta es quizá la parte más enrevesada del montaje, cuando a partir de un malentendido se definen los partidarios de repetir la oración La perla de la perfección once veces, frente a los menos ortodoxos, que prefieren repetirla una vez más. Once es el número que corresponde a la espiritualidad pura del islam, once son los pilares que sustentan las mezquitas y sabemos que las fechas de los atentados 11-S y 11-M no son casuales. La obra explica cómo el conflicto llega hasta los representantes del Gobierno francés, en plena ocupación de Francia por los alemanes. Aquéllos toman cartas en el asunto y prohiben la oración basada en el número 11, tachándola de herética. Así es como Tierno Bokar muere solo, considerado un traidor por muchos, no sin antes pronunciar estas palabras: "Pido a Dios que, en el momento de mi muerte, tenga más enemigos a quienes no haya hecho nada, que amigos". (11)
En la segunda parte de "Los hermanos Karamasov", libro V, Cap. V, se encuentra la leyenda de "El gran inquisidor". Iván le cuenta a su hermano Alioscha la historia que transcurre en Sevilla, España, durante la Inquisición, en pleno siglo XVI "cuando cada día llameaban las hogueras en el país para mayor gloria de Dios, y cuando, en ingentes autos de fe quemaban a los terribles herejes" (12) Iván alude, como introducción a su historia, una referencia al teatro religioso medieval y a relatos y poemas que circulaban en la época.
Jesús vuelve a descender a la Tierra y realiza curaciones y milagros mientras es seguido por el pueblo. Cuando Jesús resucita a una niña a pedido de su madre, pasa por allí un cardenal que tenía el cargo de gran inquisidor seguido por la guardia del Santo Oficio. Ordena de inmediato apresar al hombre que está realizando los milagros. A partir de este momento comienza un monólogo del inquisidor (que ya tiene 90 años):
"Mañana te condenaré y morirás en la hoguera como el peor de los herejes y ese mismo pueblo que hoy te besaba los pies se precipitará mañana a una indicación mía para alimentar tu hoguera. ¿Los sabes Tú quizá?..."
El inquisidor se enorgullece de haber conseguido, junto a la Iglesia, la supresión de la libertad para que los hombres sean más felices y le reprocha a Jesús el haberle dado libertad a los hombres, explica Iván a su hermano.
Cuando el inquisidor se calla finalmente, Jesús lo abraza sin decir una palabra y se va. Peter Brook nos condujo hasta aquí para hacernos comprender el propósito del inquisidor, pues los que no están ligados a lo que vivimos hoy: "Los que no creen en Dios (...) hablan sobre el socialismo, la anarquía, sobre el cambio de la humanidad; ahora bien, estos temas son lo mismo, pero enfocados bajo otra cara". (13) En una palabra, como decimos nosotros, son distintas caras de una misma moneda.
El tema del poder ya estaba planteado en las otras dos puestas de Brook ya mencionadas: es una trilogía donde Krishna es maldecido, Tierno Bokar es reprimido y Jesús es un hereje que es condenado por el inquisidor.
El teatro sagrado va profundizándose en puestas como éstas y casi parecen un llamado a una religiosidad interior de no importa qué signo. La escenografía oriental que las rodea parece querer poner el acento en ese alejamiento de Occidente de los valores esenciales a la persona humana. Sólo en pequeños espacios puede encontrarse a quienes conservan estas verdades, en lugares a veces poco conocidos, pero siempre serán rechazados, perseguidos, puestos en prisión y hasta asesinados por algún inquisidor que no renuncia al poder.
Terminamos también con palabras de Peter Brook en el final de su obra autobiográfica "Hilos del tiempo":
"En un pueblo africano, cuando un contador de historias llega al final de su cuento, pone la palma de la mano en el suelo y dice:"Aquí dejo mi historia". Y luego añade:"Para que otro la pueda recoger otro día".
Notas
Esta ponencia es parte del libro sobre Peter Brook que será publicado por la editorial ATUEL/LA AVISPA, en la colección de Biblioteca de historia del teatro occidental, serie Siglo XX, dirigida por Jorge Dubatti.
1. Tomado del portal de Les Bouffes du Nord:
"Même si les deux grands chefs d'oeuvre Les Frères Karamazov et Le Mahabharata appartiennent à tous les temps, ils sont d'une actualité mordante. Depuis des années nous rêvions de présenter (ensemble) Le Grand Inquisiteur et une partie du Mahabharata qui nous touchait particulièrement La Mort de Krishna. Mais le moment semblait n'être jamais propice. Subitement les événements ont décidé pour nous. Cette saison La Mort de Krishna revient aux Bouffes et rejoint Le Grand Inquisiteur et Tierno Bokar. Ces trois textes qui viennent de loin touchent en profondeur les préoccupations, les inquiétudes et les questions d'aujourd'hui." Peter Brook. Volver
2. BROOK, Peter. El espacio vacío. -Barcelona : Península, 2000, p. 51. En la edición en inglés: I am calling it the Holy Theatre for short, but it could be called The Theatre of the Invisible-Made-Visible: the notion that the stage is a place where the invisible can appear has a deep hold on our thoughts, p. 42 en: BROOK, P. The empty space. -Londres : MacGibbon & Kee, 1969. La traducción al español está modificada por mí. Volver
3. OIDA, Yoshi. Un actor a la deriva. -Guadalajara : Ñaque, 2002. p. 23. Volver
4. BROOK, P.op.cit., p. 66. Volver
5. BROOK, P. op.cit., p. 68. Volver
6. BROOK, p. Provocaciones :40 años de experimentación en teatro (1946/1987).-Buenos Aires : Fausto, 1989. p. 259. Volver
7. BROOK, Peter. Provocaciones, op.cit, p. 180. Volver
8. Maurice Bénichou es protagonista de La mort de Krishna que bajo la dirección de Peter Brook se estrenó el 17/09/03. Nacido en Argelia y residente en Francia desde los 12 años. En teatro trabajó bajo la dirección de Jorge Lavelli, Patrice Chéreau, Pierre Debauche. Desde los 70 trabaja con Peter Brook en el Theatre Les Bouffes du Nord con quien hizo El Mahabharata y La tempestad. En cine actuó en Amélie y actualmente dirige el teatro Knock. Volver
9. EL PAÍS, Espectáculos, 16-07-04. Begoña Barrena. Duisburg. Volver
10. EL PAÍS, op.cit. Volver
11. EL PAÍS, op.cit. Volver
12. Todas las citas están tomadas de: DOSTOIEVSKI, F. Los hermanos Karamasov.-2ª. Parte, libro V, cap. V, El inquisidor general.-8ª. ed.-Madrid : EDAF, 2003. ps. 291/310. Volver
13. COURNOT, M. op.cit. Volver
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