Beatriz, la historia de una mujer inventada
De Laura Pagés y Sergio Mercurio. Intérprete: Laura Pagés. Dirección: Sergio Mercurio
Sinopsis
De Laura Pagés y Sergio Mercurio
Intérprete: Laura Pagés
Dirección: Sergio Mercurio
Mientras evoca y encarna personajes de su entorno, reales o imaginarios, Beatriz vive sola con los miedos, mitos y frustraciones que recorren tres generaciones de mujeres. Nacimiento y muerte, encuentro y desencuentro atraviesan la historia. Con solo una muñeca de tamaño real, la titiritera Laura Pagés logra desdoblarse y crear varios personajes que muestran diferentes momentos de una mujer en el final de su vida.
Este espectáculo integra el ciclo Teatro de títeres para adultos 2011
Espectáculo sin intervalo
Duración: 50 minutos
Temporada 2011
Notas y críticas
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Beatriz
Carlos Pacheco. La Nación. 16/07/2011Una obra de títeres para adultos, que muestra a una mujer y su vacío afectivo.
Dentro de su ciclo de títeres para adultos, el CELCIT abrió su temporada con funciones de este unipersonal que ha cumplido, desde su estreno, con presentaciones en diversos escenarios. La titiritera Laura Pagés manipula a una criatura de tamaño natural que cuenta las desventuras de su vida, a veces con picardía, otras con sorna, siempre con una marcada pasión.
Beatriz atiende un negocio de barrio, una lencería. Allí se encuentra con amigas y comparte quizá los mejores instantes de su monótona vida. Mantiene con su esposo una relación rutinaria que sólo la problematiza y la lleva a reflexionar sobre las actitudes machistas. Y tiene dos hijas, una de ellas tal vez apropiada.
Nada en la vida de esa mujer es atractivo. Su existencia trasciende entre malos momentos, comentarios tontos, pensamientos banales. Su negocio es un punto de escape, pero ese escape tampoco posibilita un cambio sustancial de su conducta.
Podría decirse que Beatriz es una típica señora de barrio. Pero, en verdad, es una buena caricatura de una señora esquemática que no ha encontrado en la vida alguna posibilidad real de desarrollo personal, afectivo.
Lo más atractivo del espectáculo es la manipulación de Laura Pagés, quien apenas se percibe en escena. Su labor es de una minuciosidad extrema. Le presta su voz al personaje, también le posibilita movilidad, pero lo más importante es que le transmite una energía tan intensa a esa criatura, de rostro de goma espuma y vestido de satén, que Beatriz adquiere una entidad conmovedora.
Sin dudas, la relación creativa de Pagés y Sergio Mercurio (conocido como "el titiritero de Banfield") es sumamente potente. Logran que un objeto inanimado como Beatriz posea una espesura notable y, además, la platea se identifica con ella de manera inmediata.